Marcelo es un nombre masculino de origen latino. Su significado es ‘como el martillo‘. Hoy, en España, 6.625 hombres celebran su santo gracias a San Marcelo I, Papa. 

Marcelo I fue designado como Papa durante unos años, del 308 al 309, siendo uno de los que menos tiempo estuvo en el cargo. Se dice de él que sufrió mucho porque fue expulsado de su patria, muriendo en el destierro. No obstante, es recordado como uno de los sacerdotes más valientes de Roma durante las persecuciones de Diocleciano.

En una época en la que el cristianismo estaba prohibido, se encargó de edificar templos destruidos y dividió Roma en 25 sectores. Colocó a un párroco al frente de cada uno y encargó la creación del cementerio del Papa Marcelo.

Marcelo I reorganizó la cúpula de la Iglesia, gracias a su un carácter tenaz y enérgico. Hubo gente que le tachó de riguroso.

Muchos cristianos habían renegado públicamente de su fe por temor a las represalias. Unos, los rigoristas, defendían que la Iglesia no debía admitir a los que negaron su fe. Por su parte, otros, los manguianchos, eran partidarios de su reingreso en la comunidad cristiana.

El Papa Marcelo, tras consultar con su consejo de sabios, estipuló que todo aquel cristiano que quisiera volver a la Iglesia podría hacerlo, pero a cambio de una penitencia.

La decisión no sentó bien a todos los rigoristas. Uno de ellos, decidió denunciar al Papa ante el emperador Majencio, quien decretó la expulsión de Roma de Marcelo. Cuenta el Libro Pontifical que Marcelo nunca abandonó de la ciudad, sino que se refugió en casa de una mujer llamada Lucina.

Desde aquel lugar dirigió a los cristianos. La casa de Lucina terminó convirtiéndose en templo de San Marcelo. Hoy es una de las iglesias más antiguas que se conservan de toda Roma. 

Este y otros santos son celebrados durante el 16 de enero:

San Jacobo obispo de Tarantasia

Santa Juana

San Leobato

San

San Otón

San Pedro, mártir

San Tiziano

San Triverio

San Acursio

San Adyuto

San Berardo

San Danacto

San Furseo

San Honorato