Áurea es un nombre femenino de origen latino, cuyo significado es ‘oro‘ o ‘aquella que es de oro‘.
Santa Áurea de San Millán (1.042 – 1.070) nació en Villavelayo (actualmente, en La Rioja) en plena ocupación de la península por parte de los musulmanes. Y, cuando tenía sólo 10 años, se recluyó en el monasterio de San Millán de Suso, donde murió con 28 años.
Cuando la joven Aúrea fue por primera vez al templo cristiano le dijo al prior: «Señor, Dios lo quiere, tal es mi voluntat, prender orden e velo, vivir en castidat, en rencón encerrada yacer en pobredat, vivir de lo que diera por mi la christiandat».
Tras pronunciar estas palabras le fue concedido el hábito de esposa de Cristo. Pasaba los días y las noches rezando, daba consejo a quien se lo pedía, preparaba hostias para la misa, y tejía y cosía para los componentes de la iglesia.
Durante su vida, tuvo varias visiones. La más destacada es aquella en la que vio su propia muerte. Antes de que llegara, cerró los ojos, dio gracias a Dios, y nunca más se sintió mal. Una vez en los cielos, siguió apareciéndose ante su madre para seguir aconsejándola.
La vida de Santa Áurea de Millán fue escrita en latín por Don Munio y traducida al castellano por Gonzalo de Berceo, el primer clérigo conocido en firmar el mester de clerecía, la literatura medieval. Su obra Poema o vida de Santa Oria se compone de los versos alejadrinos propios de la época.
Este y otros santos son celebrados durante un 11 de marzo:
San Benito de Milán
San Constantino de Escocia
San Oengo Cúldeo
San Pionio
San Sofronio de Jerusalén
San Vicente, abad
San Vidiciano
Santo Domingo Câm