Juan es un nombre masculino de raíz hebrea, que significa ‘el que es fiel a Dios‘.
Este santo nació el 8 de marzo de 1495 en Montemor, Portugal. Poco antes de cumplir los 12 años, Juan se mudó a Toledo. Concretamente, a la casa de Francisco Cid Mayora, donde trabajó como pastor. A los 27 años, el beato se alistó a la fuerzas armadas del emperador Carlos I para defender Fuenterrabia de las tropas francesas. También combatió en Viena, en 1532, cuando los turcos del sultán Solimán I sitiaron la ciudad.
Al regresar a la Península tras prestar sus servicios militares, Juan recibió la noticia de la muerte de sus padres. Fue cuando comenzó una aventura que le llevaría a África y a conocer al caballero Almeyda y a su familia. Allí, fue contratado como sirviente, pero al poco tiempo cayeron gravemente enfermos. Sin recursos, el santo comienzó a trabajar en la construcción de la muralla de Ceuta para costear la manutención de la familia. Un tiempo después cruzó el Estrecho y se instaló en Granada, donde abrió una librería y entró en contacto con la literatura religiosa y devota.
Cuando escuchó el sermón de San Juan de Ávila en la Ermita de los Mártires, se convirtió al cristianismo. Adoptó entonces unos comportamientos propios de un demente, posiblemente avergonzado por su pasado y por sus acciones. Encerrado en Hospital Real, se dedicó a curar a enfermos y mendigos. Mediante la reflexión, decidió encomendarse a la Virgen de Guadalupe, en Extremadura, y entregarse a todos los pobres, enfermos y desfavorecidos del mundo.
Volvió a Granada con el espíritu renovado. Edificó un hostal en el que acogió a todo tipo de personas. Su fama llegó hasta el obispo de la ciudad, quien le nombró Juan de Dios. Su obra crecía y con ella el número de hostales. El santo, no obstante, contrajo una grave enfermedad respiratoria al tirarse a un río para salvar a un joven. Esto le costó la vida, pero dejó un legado de discípulos que continuaron su labor. Beatificado en 1630 y canonizado en 1690, fue nombrado el patrón de los hospitales y de los enfermos. Sus restos descansan en la Basílica del Hospital San Juan de Dios.
Este y otros santos son celebrados durante este 8 de marzo:
San Dutaco
San Esteban de Obazina
San Poncio de Cartago
San Félix de Domnoc
San Humfrido
San Litifredo
San Provino de Como
San Senano
San Teofilacto
San Veremundo
Beato Faustino Míguez
Beato Vicente Kadlubek